A prueba de niños para su niño

A medida que los niños/as van creciendo, crece también su curiosidad natural. Por eso, tienen tendencia a explorar y amar el trabajo. Aún más, cuando empiezan a caminar por su cuenta y logran llegar al punto más lejano posible. Éste es, para el niño, un verdadero logro que puede ser muy gratificante para los padres. Sin embargo, la exposición al peligro es lo que se encuentra del otro lado de la moneda. La falta de experiencia de los niños los hace susceptibles a lesiones no intencionales.

Para nombrar unas pocas, estas son: quemaduras, envenenamiento, asfixia y ahogamiento. Los padres deben asegurarse de vivir en un hogar a prueba de niños, que sea lo más seguro para ellos. A continuación, se describe una serie de situaciones en un hogar a prueba de niños.

Prevención de incendios
Asegúrese de que los detectores de humo en todas las habitaciones de la casa estén operando, al monitorear de cerca las pilas y sustituirlas en caso necesario. Todos en la casa deben ser informados, haber hecho simulacros y saber de memoria los pasos a seguir cuando se detecta el humo y el fuego. Repase con los niños las rutas de escape de incendios y todas las salidas disponibles en caso de que suceda.

A prueba de venenos
Selle las soluciones de limpieza correctamente y guárdelas en un lugar, fuera del alcance de los niños después de cada uso. Bloquee los cajones donde se guardan las vitaminas, medicinas y productos tóxicos como las bolas de naftalina, detergentes y artículos de tocador. No compre ni tenga plantas venenosas dentro de la casa. En muchos casos, las más decorativas suelen serlo. Como previsión para una emergencia, tener un cartel con el número de la línea de emergencia del hospital y del centro de control de envenenamientos más cercanos, en una parte visible para todos en su casa o en la unidad de teléfono, si fuera posible.

Prevención ante los ahogos
Dé a sus hijos/as juguetes que sean apropiados para sus edades. Los niños menores de cinco años, por lo general, intentan tragar las piezas pequeñas de los juguetes. Por tanto, es recomendable darles juguetes lo suficientemente grandes y sin piezas sueltas. Revise siempre cómo están de flojos los tornillos y pernos y compruebe que queden bien apretados. Asegúrese de no dejar en cualquier lugar accesible a los niños/as, artículos pequeños o diminutos ya que ellos/as sólo los recogerán y tragarán intencional o accidentalmente.

Cama segura
Mudar al niño/a a su propia cama es más seguro que el uso de la cuna en el momento en que su hijo/a crece y toma altura lo suficiente como para salir de ella. Hasta que aprenda a dejar de rodar en su sueño, se debe adosar un carril desmontable, para evitar una caída accidental por rotación. Utilice camas que sean bajas para mitigar las lesiones, en caso de que se caiga. Otra opción, emplee simplemente un colchón tendido en el suelo, hasta que aprenda cómo estabilizar su cuerpo durante el sueño.

A prueba de agua
Dejar a su niño solo en el cuarto de baño, incluso por solo una cuestión de segundos, significa un riesgo. En el caso en que usted tuviera que salir, pídale a alguien que se haga cargo de la supervisión. Use alfombras antideslizantes para prevenir el riesgo de patinar si los pisos del baño están muy húmedos o mojados. Un cuidado especial y varias precauciones se tendrán en cuenta cuando sus hijos estén en una piscina. Nunca confiemos sólo en los salvavidas inflables. Es importante también que alguien que conozca de salvataje y cómo tratar a las personas al sacarlas del agua, viva en los alrededores o los acompañe.

Prevención de caídas
Las ventanas tienen que ser lo suficientemente altas para que los niños pequeños no puedan subir. Coloque los muebles y otros accesorios de modo que no se puedan utilizar para subirse a ellos y alcanzar la ventana. Dígales a sus hijos que se mantengan alejados de las escaleras al tiempo que proporciona dispositivos-guardias de escaleras, vallas, topes, redes o barandas para tranquilidad de todos.

Su casa es el primer parque infantil de su hijo. La satisfacción de observar a sus niños/as que crecen y comienzan a jugar, en una casa que ha sido estructurada por expertos como una verdadera casa “a prueba de niños”, no tiene precio.